Llevo el sonido de la noche en cada paso que doy, en cada esquina que me aguarda para engullirme con su manto gris, con su olor a desierto mojado, con las huellas de otros que fracasaron. Llevo el sonido de la noche en mis bolsillos parchados, junto a las llaves que abren la puerta de mi celda: tus ojos… Conforme avanzo la noche es mi propio nombre, me abrigo con las estrellas. Soy sonido. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario